viernes, 7 de enero de 2011

Cuento de David Luena

Hace un año llegó a santander un niño de Etiopía y ahora es uno de mis mejores amigos.

Cuando llegó mi amigo, me dio mucha pena porque él nos contó que no tenian agua en casa, que tenia que ir a buscarla muy lejos con dos calderos y sólo tenía 5 años.

También le vimos los pies, lo dedos no tienen uñas, pues no tenía zapatos y tampoco un pediatra que se los curara.

Ahora él esta muy contento aquí, pues ya tiene todo los que los niños de Santander tenemos: Va al colegio ahora y tiene muchos amigos, tiene zapatos, médico y lo mejor de todo es verle comer, le gusta todo todo, hasta las verduras y tarda muy poco en comer siempre nos gana a todos.

Ahora mi amigo es feliz, y le gustaría que todos los niños de Etiopía pudieran estar como él.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...